viernes, 6 de marzo de 2015

Bogotá, escampadero de los varados, de todos y de nadie

Hoy, día en el cual mi nieta no debía ir a clases, 
aprovechamos el tiempo para visitar el Museo del Mar, 
La academia de la Lengua, el Museo del Oro, visitar nuestros 
hermosos y coloniales templos como La Tercera, La Iglesia 
de San Francisco, El Sagrario y la Catedral. El Panteón Nacional 
o Iglesia de la Veracruz.
De paso por todos estos lugares, fuimos haciendo un tur por 
el centro de Bogotá, mostrando, de nuevo a mi hija y dando a conocer 
a mi Tesoro, los lugares históricos del centro de la ciudad.
Por algo deparado, llegamos a un valioso proyecto de El Tranvía 
de Bogotá, dirigido por un historiador de la Universidad Javeriana. 
Se recorre el trayecto más evaluado, la Candelaria. 
Claramente explicado por Felipe, autor y desarrollador 
del proyecto, con el asenso de Colciencias.
Fue enriquecedor oír detalles, que aunque de 75 años, ignorábamos. 
Lo más gratificante fue enterarme que los Muiscas poblaban 
el Altiplano de Bogotá, más de cuatro décadas antes de Cristo.
Mi atención estaba puesta en sus explicaciones y videos alusivos; 
música de fondo de la época. Distinguir sitios conservados como 
patrimonio nacional y lamentar lo que no quedó amparado por la ley,
 porque ya se había destinado a nuevas construcciones y/o 
remodelaciones acomodadas, y carentes de arquitectura.
Dolió en lo más profundo de la –idiosincrasia-*, lo que más 
puede doler a cualquier “bogotano de cepa”, como decíamos antes, 
ver el arte destructor de cuanto sitio existe, y perder lo auténtico 
de los muros en piedra. Un muro de “tapia pisada”, con pintura, 
puede restablecerse, pero lo que está en piedra, QUEDA PERDIDO.

No deja de molestar a los santafereños, muy pocos que somos, 
saber, sin entender, ni aceptar, que quienes han destruido y acabado
 la “Atenas Suramericana” de años ha, no son bogotanos…
es gentuza, muchedumbre, resentidos, que escondidos en lo que 
ellos llaman expresión, ensangrentan con mensajes sin filosofía, 
ni literatura, las casas coloniales, monumentos históricos nacionales 
y edificios que engalanaban nuestra ciudad.

Estos grafiteros de “medio pelo” que posiblemente solo han tenido 
la oportunidad de dormir en un camastro, tenido por techo un “cambuche
por casa una pocilga; unos sin hogar, dónde les hubieran formado 
VALORES, continúan sepultando los muros y paredes y cuanto 
lugar hay limpio, para estampar su "pata de gallina", porque jamás 
leyeron que: 
“Escribir en la muralla es papel de los canallas”.
No lloraron mis físicos ojos con esta contaminación visual,
lloraron los ojos de mi alma, al saber que la pobre ciudad de Bogotá, 
de todos y de ninguno, despensa y nevera de cualquier rebuscador de 
patria, siempre tendrá una alcaldía acéfala, un gobierno permisivo, 
unas autoridades sin mando.
Nada qué mirar… 
Agrego a 2017. Enmascarado el nuevo alcalde, se tomó 
el Humedal Thomas Van der Hammen, reserva del Norte de Bogotá. 
Maquinaria de construcción que, con la disculpa de viviendas,
atenta contra las hermosas especies de fauna, flora y agua. 

Falta un cuerpo docente que eduque el sentido común, desarrolle
el sentido de pertenencia, estudie y enseñe la instrucción cívica
 desde el jardín, la escuela, el bachillerato y la universidad, 
para contrarrestar, la innata inclinación a la destrucción 
de los grafiteros.
*Indio sin gracia.

1 comentario:

  1. Dices; “Falta cuerpo de docentes” ¿falta en verdad? Eres ¡injusta! No no !falta!, pero les pusieron candado en la boca y bien seguro. Si no pueden hablar, como pueden orientar? Si no pueden enseñar, como pueden dirigir? Si no pueden explicar, como pueden hacerse entender?
    Un PROFESOR de verdad, honesto y preparado, tiene la sagrada MISION de enseñar y dirigir igual que los padres; para ayudarles a formarlos. A formar a quienes? Al hombre limpio del mañana. A los profesores les pusieron un cerrojo asegurado con amenazas…Repito: ¿Cómo enseñan, cómo dirigen como se hacen entender? NO TIENEN COMO HACERLO!! En cambio al ignorante estudiante que necesita ser dirigido y bien informado porque nada sabe, le dieron como a los BANDIDOS, todos los derechos, hasta el de matar profesores…como algunas veces se ha sabido: profesores maltratados y golpeados porque no le ponen precio a su conciencia, porque no venden notas, porque no se prestan a porquerías en general. PROFESORES !si hay!!
    Las tres autoridades máximas en cualquier país, en éste están obligadas a ENMUDECER. Como todo…Querida no se le hace que por eso vamos como vamos?

    ResponderEliminar