Por coincidencia o inspiración de ciertas situaciones,
llegó a mi escritorio un profundo texto que me hizo recapacitar.
Estudiosa de
lo que compete a la familia, deseo compartir
en mi blog la siguiente –RECOPILACIÓN
– sobre el estudio
del Padre John Hampsch.
La sanación intergeneracional es una oportunidad de
reconocer y sanar lo que influye en la familia, desde el pasado,
con
repercusiones para el futuro.
Actos negativos que se introducen
en nuestra “sangre”
y tienen consecuencias.
Cada vez se va reconociendo más que
no solo se heredan
los rasgos físicos, sino también los rasgos psicológicos.
¿Cuántas
veces oímos que el mal genio es un rasgo familiar?
Igualmente la ira, es un origen de desamor no sanado.
“Las familias son los bloques que edifican la sociedad;
“Las familias son los bloques que edifican la sociedad;
como grupos básicos naturales sociales que tienen un lugar
muy especial en el plan divino de sanación colectiva.
Porque la familia se
constituye por la sagrada unión
del matrimonio.
Las frecuentes bendiciones en el Antiguo Testamento
sobre las familias que reverencian a Dios se hacen patentes
con signos externos
tales como riqueza, categoría social
e incluso salud.
Son más importantes las internas
relaciones con la familia,
como la lealtad a Dios y a su ley.
Así pues cuando una familia procura vivir junta con amor
Así pues cuando una familia procura vivir junta con amor
desinteresado, venerando a Dios, dando acción de gracias
y teniendo FE, sus miembros estarán
contentos y en armonía.
Sigue dos
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