martes, 26 de julio de 2022

La vida y el juego II

Con el juego de "La pérgola de la Niña María",

 que me dispuse nutrir a mi comodidad y antojo, y que

 alguna de mis cercanas amigas llamó "muñequero", 

y yo acaté. Llegó a mi alma la "última"

DIVERSIÓN de la mundanidad, en el deseo trascendental 

de mi pobre alma sedienta de PAZ...

Fue el plácido lugarcillo donde el silencio se 

interrumpía por el vuelo de torcazas, colibrís

y garzas, azulejos, babaguyes y tominejos,

mirlas y copetones.

Al oído, el más hermoso era el agudo trino de los toches, 

cuyo amarillo y negro plumaje deleitaba la vista. 

El canto de éstos últimos elevó mi espíritu.

El lejano y rudo cantar de un gallo vecino,

contrastó aquellos trinos y fortaleció el débil

sonido de mis suspiros, que alegraban las ansias de vivir.

No era un muñequero, nooo fue la oportunidad de aislamiento

citadino, que todo anciano sueña, que DIOS regaló 

y el entorno produjo sin dejar de vivir. A ti...

“Alegrémonos con la belleza de la primavera,

el celeste del éter, el canto de los pájaros y

la magnificencia de las puestas de sol

Marden

jueves, 21 de julio de 2022

La vida y el juego I


                                               EL pintor Gerard Rosés se expresaba así:

“La única forma de mantenerse joven mentalmente 

es no dejar nunca de jugar. 

Independiente de la edad, 

debemos vivir como si estuviéramos poniendo 

a prueba el mundo, es decir, seguir siendo niños.

Si observamos a grandes artistas como Matisse,

Picasso o Miró, entendemos que en esencia

continuaron haciendo lo mismo que en su infancia:

jugar, divertirse, ponerse nuevos retos. 

Mantener la ilusión cada día y no renunciar a los valores

de la infancia que es el elixir de la juventud.

También para el cerebro, pues en cuanto empiezas

a pensar como un viejo ya has perdido la batalla. 

Por eso es bueno que los abuelos estén cerca

de sus nietos y les vean jugar e imaginar.

“Los niños son nuestros mejores maestros”.

Gracias mi NIÑA LINDA

por moverme a escribir cursilerías,

y, en cuya voz, "abuelita Esperanza",

suena diferente/...