Evitemos la delincuencia
Decálogo publicado hace más de 70 años en una revista americana,
atribuido a la Policía de Houston, Texas.
El delincuente nace en el hogar y con nuestra genética.
Duele saberlo e inicialmente no lo aceptamos, pues todo ser humano desea lo mejor para su familia o descendencia; buscamos la admiración que despertamos en nuestros semejantes, sin embargo, entenderlo nos lleva a la superación de nuestro entorno familiar.
l- Desde la infancia déle todo lo que pida. -Así crecerá con el convencimiento de que el mundo se lo debe todo.
2- Celébrele las groserías y malas palabras. -Le hará sentirse gracioso.
3- No le enseñe principios espirituales, espere a que cumpla los 21 años. -Para que decida su libre albedrío, será un anarquista.
4- Recójale lo que deja tirado; juguetes, libros, ropa, zapatos.
-No le permita valerse por sí mismo, culpará a los demás y no cogerá buenos hábitos.
5- En su presencia riña con su cónyuge.-Así no le causará impresión el día que su hogar se destruya, para conformar uno diferente.
6- Déle gusto y todo el dinero que le pida; evite que se lo gane él mismo. -Pobrecito, no quiero que repita los trabajos que yo he pasado.
7-Satisfaga sus caprichos con alimentos, juguetes, comodidades.
- La privación puede causarle frustraciones.
8.- Solidarícese en los problemas que entable con los maestros, amigos y vecinos.
-Todos le tienen tirria”.
9.- Cuando esté en serios problemas, discúlpelo, así sea con usted mismo.
-“Caramba, nunca pude con este muchacho”.
10.- Después de lo anterior:Oscar Forero Racines, nos llama a la reflexión sobre la orientación que demos a nuestros hijos para evitar la descomposición social.
“Prepárese a llevar una vida llena de pesares, pues lo más probable es que se la hubiera labrado usted mismo”.
