miércoles, 18 de septiembre de 2013

Oasis de amor...

El silencio de mi alma
Por qué será que en el ocaso de la vida, 
se hace escaso un Oasis que de pausa a mi inquietante descanso, 
para tener el respiro y reposo que no exija recreo, ni paz, 
ni tranquilidad, para que llegue hasta mi alma la conciliación 
y paciencia de una tremenda ansiedad cuyo alivio y sosiego, 
suspendan mi alma y la tuya en la quietud de la calma del corazón.
Que la claridad y suavidad de la alianza sea duradera.
Que la serenidad alimente la placidez y bonanza de tus actos y del
constante equilibrio y avenencia de 
una armonía de concordia, 
en el silencio de un hermoso Oasis.

Buscando una sombra

¡No a la guerra!     ¡No al aborto!

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