En aquel tiempo, dijo el Señor:
"¿A quién se parecen los hombres de esta generación?
¿A quién los compararemos?
Se parecen a unos niños, sentados en la plaza, que gritan a otros:
"Tocamos la flauta y no bailáis, cantamos lamentaciones y no lloráis."
Vino Juan el Bautista, que ni comía ni bebía, y dijisteis que tenía un demonio;
viene el Hijo del hombre, que come y bebe, y decís:
"Mirad qué comilón y qué borracho, amigo de publicanos y pecadores."
Sin embargo, los discípulos de la sabiduría le han dado la razón.
Lucas 7, 31-35 - Casa para tu FE Católica. |
La siguiente anécdota es mera coincidencia,
respecto del Evangelio de hoy.
¿A quien tener
contento?
-En un lejano tiempo y para
un desconocido pueblo,
se dirigían dos
personajes y un asno.
-El abuelo, el niño y la
carga…
Qué hombre tan
desconsiderado, decían sus vecinos.
Cómo puede abusar del animal y colocarle tanto peso?
Cómo puede abusar del animal y colocarle tanto peso?
Podría solo dejarle la
carga.
Helí y don Jacinto se
bajaron del jumento y echaron
a píe…El burro con la carga.
Al segundo poblado,
comentaron podría montar al chico
sobre la carga.
Más adelante, el
abuelo subió al nieto y echaron a andar.
Heli sobre el burro.
Al cruzar el tercer
pueblo, comentó la gente:
¡Qué viejo tan tonto! El
muchacho tiene más vigor,
debiera bajarlo y
sentarse él.
Don Jacinto, hizo el
cambio…El burro con el abuelo.
La travesía seguía y en
el cuarto pueblito, le criticaron, diciendo:
Por qué no subirá al pequeño,
Por qué no subirá al pequeño,
cómo se atreve ir
cómodo él y dejar caminar al niño?
Se bajó del asno y siguieron
su camino.
Helí, solo montó a Pilatos un tiempito, su abuelo, lo bajó de nuevo.
Llegados al quinto, un
despoblado lugar, los miraron
con sorpresa – Tan tontos, teniendo un jumento para
ir cómodos los tres, y
solo le ponen la carga…
Se subieron los dos, abuelo y nieto…
Cuando llegaron al sexto
pueblo, algo más comercial
y con gente de
diferentes lugares, el escándalo fue mayor…
¡Qué horror! Que viejo
tan despreciable, cómo puede
abusar del animal y
colocarle tanto peso?
Podría solo dejarle la
carga.
El burro con la carga.
Así había comenzado el abuelo, el niño y el asno, al salir de su
tierra natal, para llegar al séptimo pueblo, lugar de destino,
para vender la carga…
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