Recopilación II
“A la buena de mi Dios”, diría mi madre. |
El Dr. Weiss aclara, que la falta
de satisfacción personal
en la aplicación del trato del galeno con el
paciente*,
es por el deterioro en la
actitud del médico tradicional,
quien entablaba un diálogo con su paciente y
que,
mutuamente los hacía sentir en fraterna amistad.
Los médicos hoy, pueden sentirse aislados al
resultado
de la cura o superación de la enfermedad,
porque no
creen que forman parte del éxito médico aplicado.
A su vez, los enfermos no perciben la atención
del médico,
lo asumen distante e indiferente, en el enfoque de un
trato de multitud necesitada, que está a “libre
albedrío”...
Ayuda la del Cireneo. ¡Cura, la del samaritano! |
/Se compadeció del dolor físico del Nazareno;
afloró en él la paciencia, se detuvo y se olvidó de SÍ,
para atender al abandonado/
El médico tradicional despertaba en el enfermo
la esperanza, de curación, pues “Intuía” en él, gran necesidad
de amor a través de su
dolencia, con esta percepción,
alimentaba la ilusión de pronta recuperación.
alimentaba la ilusión de pronta recuperación.
No busquemos, ni demos lastimosa,
-SINO- compasiva atención-.
El diálogo, con apoyo de la tecnología, puede
satisfacer
al galeno por la cura y al enfermo, por el resultado.
*Paciente
= resignado, sufrido,
conforme, probado.
Hoy llamado: usuario.
Al margen:
En mis experiencias personales
y familiares, Ahí estuvo Dios.
en cireneos y samaritanos.
Bendiciones:
Drs. Juan carlos y Ferney.
Me confieso católica practicante y
convencida. La espiritualidad es
para todos y no quito la autoría en
parte del texto a Brian Weiss.