La corona que tus manos tejieron ha hecho vibrar mi corazón como una alabanza.
Es el juego de “dar y retener; de mostrar y esconder”.
…si levantamos al vacío nuestras manos implorando aquello que está más allá de nuestras esperanzas.
Satisfechos estamos de lo que “damos y recibimos”.
Este amor entre tú y yo, es simple como un cantar.
“Guardo su manos entre las mías” y estrecho su seno contra mi seno.
Trato de asir la belleza;
me elude,
dejándome entre las manos solamente el cuerpo.
Síntesis de la biografía y su estilo.
Cuando Tagore murió, la naturaleza lloró. Todas las flores lloraron, porque Tagore siempre les cantó. De pronto, lo vieron en el espejo de una lágrima! – Poema: Canto de las flores.
Poema: Canto de las aves.
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